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Salud animal: La guía completa de la salud en porcinos


El cólera porcino o Fiebre porcina clásica (FPC), es una enfermedad viral, altamente contagiosa, y debido a esta rápida capacidad de contagio, o morbilidad, es que el virus de la Fiebre porcina clásica (FPC) se va diseminando entre los animales sanos que forman parte del lote en el que se encuentran los cerdos enfermos afectando a la salud animal. La Fiebre porcina clásica (FPC) es el problema sanitario que genera mayores pérdidas para los porcicultores a nivel internacional.
Conservar la salud animal en las explotaciones porcícolas es una labor que requiere de prestar mucha atención, pues son los síntomas y el comportamiento de los animales, los que nos ayudarán a identificar un posible brote de Fiebre porcina clásica (FPC) a tiempo y así evitar una pérdida económica mayor.

Salud animal: ¿Cuáles son los síntomas de la Fiebre porcina clásica (FPC)?

Entre los síntomas más notables de la Fiebre porcina clásica (FPC), se encuentra el debilitamiento extremo, siendo los animales incapaces incluso de levantarse del suelo, presentándose estados de inapetencia y lentitud. La salud animal de los cerdos ya infectados por el virus se ve afectada también por altas temperaturas corporales, siendo en algunos casos mayores a 40 grados centígrados, siendo estas fatales para el funcionamiento cerebral de los animales afectados.
La piel de los cerdos enfermos se torna púrpura, generando manchas en todo su cuerpo, además de desarrollar conjuntivitis debido a las altas temperaturas a las que se ven expuestos los delicados ojos de los cerdos. Finalmente trae graves problemas para las cerdas que se encuentren en su periodo de gestación ya que se incrementan las probabilidades de que se produzcan abortos, y que los lechones que logren nacer, traigan consigo alteraciones congénitas.
Si no se cuida la salud animal de los cerdos, la muerte es inminente.

Equinos

Salud animal: ¿Cómo curar a los cerdos enfermos?

Actualmente, no existe aún tratamiento para la cura de la fiebre porcina clásica (FPC), siendo la única opción, la prevención.
La mejor forma de prevenir un brote de Fiebre porcina clásica, es tener un estricto cumplimiento de todas las normas de bioseguridad que requiere una explotación porcícola, todo con la finalidad de que el alto riesgo de contagio se disminuya notablemente contribuyendo a la salud animal.
Una de las principales normas de bioseguridad es la limpieza y desinfección de las áreas. Para realizar este tipo de limpieza, es importante saber que los seres humanos son inmunes al contagio de la Fiebre porcina clásica (FPC), es decir, que no se trata de una enfermedad zoonótica, haciendo mucho más seguro el implementar un completo esquema de limpieza, para evitar que los brotes se diseminen. Todas las áreas en donde los cerdos se encuentren deben ser limpiadas con mucho cuidado, y cuando se habla de todas las áreas, son todas, desde el corral hasta el camión en el que serán transportados, evitando que los cerdos tengan contacto con algún animal o desecho infectado. LAVET en su portafolio de productos, cuenta con POWER CLEAN, un detergente y antiséptico, que elimina materia orgánica e inorgánica adherida a las superficies, permitiendo que SILVER BULLET, un desinfectante, actúe, destruyendo y frenando el crecimiento del virus de la Fiebre porcina clásica (FPC), contribuyendo a la salud animal de los cerdos.
Cada vez que se encuentra un cerdo infectado, se debe proceder a cuarentenar el lote, ya que el simple contacto de un cerdo infectado con uno sano basta para que la enfermedad se propague sin control afectando a la salud animal del resto de los porcinos. Una vez cuarentenados, se deben desinfectar todos los rincones del área, y los vehículos en donde se transportan, para evitar bajo todas las posibilidades que se propague cualquier brote de Fiebre porcina clásica (FPC).
Hay que tener mucho cuidado con los desechos de los cerdos, tanto los desechos coprológicos cómo los restos de comida, ya que los vectores como las moscas y el consumo de estos desechos es otro medio en que la salud animal se verá afectada.
México es territorio libre del virus de la Fiebre porcina clásica (FPC), debido a que desde el 10 de noviembre de 2005 no se ha detectado el aislamiento del agente etiológico de la fiebre porcina clásica.