Bovinos

Diagnosticando temprano gusanos intestinales


   Una de las virtudes de todo clínico veterinario es contar con las herramientas y conocimientos necesarios para llevar a cabo un diagnóstico adecuado y una detección temprana de agentes etiológicos causantes de diversas enfermedades, procurando de esta manera la salud de los animales domésticos, al tiempo que salvaguardamos la salud humana, apoyarse en un laboratorio clínico veterinario ha sido una estrategia en crescendo desde hace ya varias décadas, ya que es gracias al uso de estos que los diagnósticos y tratamientos pueden ser más certeros y eficaces (Messeguer, 1992), en cuanto se tienen la historia clínica del paciente, así como la observación de los signos clínicos se conjetura una hipótesis o sugestión ante tal o cual infección, inferencia que se puede corroborar mediante la toma de muestras y su minuciosa revisión en un laboratorio dando con un resultado más acercado y llegando al tratamiento más adecuado.

   En los animales domésticos de producción para consumo humano, o sus derivados son muy propensos a padecer enfermedades sobre todo de origen gastrointestinal, ya sea por los tipos de confinamientos, alimentación, contaminación, estrés, etc, pero de entre todos estos factores el más común son los parásitos, sobre todo gusanos redondos o nematodos, pertenecientes a la clase Nemata (Thorne, 1949) cuyos miembros infectantes más comunes en aves y cerdos son Strongyloides ransomi, Ascaris suum, Globocephalus urosubulatus, Gnatostoma hispidium y Trichinella spiralis (cerdos), Strongyloides avium, Ascaridia galli, Capillaria contorta, Capillaria annulata, Capillaria caudinflata, Heterakis gallinarum y Syngamus trachea (aves) (Junquera, 2016), con capacidades de obstrucción, intoxicación y desnutrición por competencia hacia sus hospederos, son de amplio interés estas infecciones parasitarias, sobre todo por los manejos zootécnicos de producción porcina y avícola (ambas de amplia difusión nacional) (SAGARPA, 2015), (SAGARPA, Panorama del porcino, 2014), es de mayor incidencia en temporadas de lluvias las infecciones parasitarias por nematodos, sobre todo en explotaciones de tipo extensivas (por los ciclos biológicos de estos agentes, cuyos huevos pueden permanecer en tierra por un tiempo relativamente largo) es por ello que para una detección temprana y evitar grandes pérdidas en tanto a la producción o en cuanto al ganado mismo, es mejor hacer regulares muestreos coproparasitoscópicos que se envíen a revisión en un laboratorio clínico veterinario que comprueben la sanidad de los animales.

Equinos

   La mayoría de las transmisiones son de manera vertical, es decir, de madre a hijo, es por esto que muchas veces no se detectan signos clínicos aparentes como deyecciones diarreicas o pérdidas de peso, pues el peso es uniforme entre los corrales, sin embargo la producción sigue siendo baja y como en las heces hay propagación de huevecillos, estos continúan dispersándose de manera horizontal, es decir, entre individuos de una misma generación, haciendo hincapié en estas situaciones epidemiológicas es justo pensar que la revisión periódica de los animales para su evaluación en laboratorio aumenta las probabilidades de prevención o detección temprana y acertar en un diagnóstico o tratamiento, en caso de ser necesario. (Leave, 2009).

   MEBINA PORCINOS Y AVES® es un desparasitante de amplio espectro, de uso oral con presentación en polvo para su fácil aplicación y/o combinación con el alimento o en el agua corriente, estas estrategias de desparasitación masiva son eficaces como medio preventivo o tratamiento contra las infecciones parasitarias de origen gastrointestinal, ya que el Mebendazol, de la familia de los Benzamidazoles, los cuales actúan sobre los parásitos gastrointestinales, limitando sus fuentes de absorción de glucosa y fungen a su vez como nematicida, además de que esta sal desparasitante tiene un muy bajo o casi nulo efecto tóxico sobre estas especies de destino, por lo que no afecta la producción para consumo humano (Junquera, Parasitipedia.net, 2015), por otra parte la Piperazina tiene un efecto más específico sobre los géneros Ascaris y Oesophagostomum con el mismo efecto nematicida, bloqueando la producción de acetilcolina, impidiendo que se fijen a las paredes intestinales, por lo que pueden ser expulsados algunos ejemplares en estado joven o adulto, su toxicidad sobre las especies de destino al igual que el Mebendazol es sumamente reducido o nulo, sin embargo debe regularse su aplicación, ya que es posible que los parásitos generen resistencia ante esta sal en específico (Martínez, 2007).

Bibliografía.

Junquera, P. (01 de Agosto de 2015). Parasitipedia.net. Obtenido de Parasitipedia.net: http://parasitipedia.net/index.php?option=com_content&view=article&id=322&Itemid=415

Junquera, P. (10 de Mayo de 2016). Parasitipedia.net. Obtenido de Parasitipedia.net: http://parasitipedia.net/index.php?option=com_content&view=article&id=144&Itemid=220

Leave, C. (17 de Septiembre de 2009). Parasitología General. Obtenido de Parasitología General: https://para1.wordpress.com/category/tecnicas-de-laboratorio/

Martínez, V. T. (2007). Determinación de la actividad antihelmíntico de Artemisa absinthium L (ajenjo). Cuenca, Ecuador: Universidad de Cuenca, Facultad de Ciencias Químicas, Escuela de Bioquímicas y Farmacia.

Messeguer, J. P. (1992). Manual Práctico de Análisis Clínicos en Veterinaria. Zaragoza, España: MIRA.

SAGARPA. (2014). Panorama del porcino. Jalisco, México: FND (Financiera Nacional de Desarrollo Agropecuario, Rural, Forestal y Pesquero).

SAGARPA. (2015). La avicultura de México está fuerte y se prepara para su expansión: SAGARPA y UNA. Cancún, Quintana Roo: SAGARPA.

Thorne, G. (1949). On the classification of the Tylenchida, New order (Nematoda, Phasmidia). Proceedings of Helminthological society of Washington, 37-73.