Bovinos

Fiebre de leche


 La fiebre de leche también conocida como hipocalcemia es una enfermedad que afecta a las vacas a causa de una deficiencia de calcio en sangre ya que sufren un gran desequilibrio de este mineral debido a la demanda que surge para la formación de calostro y leche.

La mayoría de las veces la fiebre de leche se da en vacas de alta producción lechera y cuando son vacas adultas, sobre todo a partir del tercer parto. Debido a que existen algunas razas que producen más que otras las principales razas que padecen este problema son las siguientes: Holstein, Suizo, Jersey, Guernsey, Shorthorn y Ayrshire.

Es una enfermedad de gran impacto en la producción lechera debido a las grandes pérdidas que ocasiona la fiebre de leche ya que nos provoca complicaciones en la baja de producción, los animales que llegan a padecer este mal llegan a producir de un 5 hasta un 15% menos de leche, o en cierto caso puede producir hasta muerte de los animales.

El calcio y el fósforo son los minerales que componen alrededor de un 70% del total de los minerales en el animal. El calcio principalmente se encuentra distribuido en tres compartimentos: tracto gastrointestinal que es absorbible, sistema óseo el cual es reabsorbible y en suero el cual es utilizable.

Signos clínicos

Los signos clínicos de la fiebre de leche varían dependiendo en qué etapa se encuentra el animal.
Cuando tenemos fiebre de leche de tipo subclínico algunos de los signos son que la vaca no defeca, flacidez rectal, indigestión, etc.

En la etapa clínica de la fiebre de leche se observan diferentes signos como la falta de movimiento por parte del animal, no come, tiene temblores musculares, y en ocasiones cuando si se puede mover el animal, cae fácilmente. El animal se ve muy deprimido y con las extremidades muy frías, llega a bajar hasta 2 grados su temperatura corporal. Ya cuando el animal se encuentra en una etapa muy difícil, se postra de cubito lateral hasta que ya no se puede levantar y si no es tratado a tiempo puede morir por una insuficiencia respiratoria.

Algunas de las complicaciones que pueden ocurrir después de la fiebre de leche son: retención placentaria, metritis, endometritis, infertilidad, prolapso uterino, prolapso rectal, desplazamiento de abomaso, síndrome de la vaca caída, entre otros.

Equinos

Diagnóstico

El diagnóstico de la fiebre de leche es muy complicado, la sintomatología puede ser confundida con los de algunas otras enfermedades, tales como: mastitis, endotoxemias, metritis, ruptura uterina, entre otras. Para diagnosticar la fiebre de leche se recomienda hacer exámenes de sangre para medir los niveles de calcio en sangre los cuales deben estar entre 4.3 – 5.1 mg/dL.

Control

Para tener un buen control de la fiebre de leche es necesario manejar una muy buena dieta en el periodo de transición que va desde las 3 semanas antes del parto hasta las 3 semanas post parto.
Una de las prácticas más fáciles para controlar la fiebre de leche es agregar sales aniónicas a la dieta, ayudando a estimular la remoción del calcio de los tejidos óseos y esto permite mantener los niveles de calcio que realmente se necesitan en sangre.

Tratamiento

Se recomienda que el tratamiento se aplique desde que se observan las primeras etapas de los signos clínicos para evitar que la vaca se nos caiga y logre salir adelante más rápidamente.
En laboratorios veterinarios LAVET tenemos un producto muy eficaz para el tratamiento de la fiebre de leche, que es Calciton, el cual se recomienda aplicar de 100 a 200ml para los bovinos por vía intravenosa lenta o intramuscular profunda. La vía intravenosa tiene un efecto más rápido pero hay que tener mucho cuidado con la velocidad de administración.